¿Estás pensando en dar el gran paso y abrir tu propio centro? Ya sea una consulta médica, una clínica dental, de fisioterapia, psicología, podología o cualquier otro servicio de salud, hay un trámite absolutamente crucial antes de abrir las puertas: la Autorización Sanitaria.
Hoy vamos a desglosar la documentación general que las Consejerías de Sanidad de las Comunidades Autónomas suelen exigir para conceder esta autorización a un nuevo centro.
Este vídeo es una guía GENERAL. La sanidad es competencia autonómica en España, lo que significa que CADA COMUNIDAD AUTÓNOMA tiene sus propios formularios, tasas, y requisitos específicos. SIEMPRE, SIEMPRE deberás consultar la normativa y los procedimientos exactos de la Consejería de Sanidad de TU Comunidad Autónoma.
¿Qué es la Autorización Sanitaria y Por Qué es IMPRESCINDIBLE?
La Autorización Sanitaria es el permiso que otorga la Consejería de Sanidad y que certifica que tu centro cumple con TODOS los requisitos de personal, de equipamiento y de funcionamiento necesarios para garantizar la seguridad y la calidad de la asistencia a los pacientes.
Sin esta autorización, simplemente, NO puedes operar legalmente. Abrir sin ella puede acarrear sanciones muy graves, incluyendo el cierre del centro.
Es importante diferenciarla de la licencia municipal de actividad o declaración responsable que concede el Ayuntamiento. Son dos trámites distintos y necesitarás ambos. La autorización sanitaria se centra específicamente en los aspectos de SALUD y seguridad del paciente y del personal.
Este proceso suele implicar dos fases principales, aunque a veces se tramitan juntas:
Autorización de Instalación: Permiso para realizar las obras o acondicionamiento del local según los requisitos sanitarios.
Autorización de Funcionamiento: Permiso para iniciar la actividad una vez que el centro está listo y se ha comprobado (normalmente mediante inspección) que cumple todo lo exigido.